28 de septiembre de 2007
25 de septiembre de 2007
Poesía mala
Ya sé
Te pasa exactamente lo que pensé
Vos como yo
Caminamos bien adentro para el fondo
No me extraña
Y ya lo sé
Esta noche vas a tomarte el lexotanil
Vas a pensar en la oscuridad que te querés ir
Que estuviste con el mismo jogging todo el día
Las poesías malas son las indicadas
Para este tipo de tristezas
Uno no puede protegerse
Ya lo sé
Mañana vas a levantarte con los dientes apretados
Yo desde mi cama
Te voy a oír
(lo publica Lowrey, pero es de Dana Dolce. un gran abrazo para ti querida)
Te pasa exactamente lo que pensé
Vos como yo
Caminamos bien adentro para el fondo
No me extraña
Y ya lo sé
Esta noche vas a tomarte el lexotanil
Vas a pensar en la oscuridad que te querés ir
Que estuviste con el mismo jogging todo el día
Las poesías malas son las indicadas
Para este tipo de tristezas
Uno no puede protegerse
Ya lo sé
Mañana vas a levantarte con los dientes apretados
Yo desde mi cama
Te voy a oír
(lo publica Lowrey, pero es de Dana Dolce. un gran abrazo para ti querida)
23 de septiembre de 2007
anonadana
Hoy domingo en visperas de la famosisima Batalla de Tucumán, subí al colectivo en el último servicio que pasa cerca de la una de la mañana y al sacar la billetera para pagar, descubro que lo más chico que tenía era un billete de veinte pesos. Uno sesenta, digo. El chofer, un tipo de cincuenta años, con bigote clásico de los 60´s, esos bien tupidos por debajo de la nariz, del tipo militar duro, no reacciona. Esquiva un omnibus detenido, pone tercera y acelera. Cuánto? Uno sesenta, repito. Corta el boleto y me lo entrega. Espero mi vuelto, mas no me lo da, y no solo eso, sino que tampoco me dice nada. Espero unos segundos. Nada pasa. Tomo asiento en el primero, ese que está junto a la puerta y tampoco digo nada. Cada vez que se abre, el frío entra y me congela los pies. Me dará en algún momento el vuelto? no tendrá cambio? no tiene ganas de buscarlo? quiere robarme? quiza al pedir mi dinero al finalizar el viaje me dijera, disculpá pibe, no tengo cambio, pero cómo? devolveme la plata entonces. Pero vos ya viajaste, si no te cobro, me descuentan el boleto. Me hubiera dicho que no tenia cambio y no subía.
Ya había desarrollado en mi pensamiento una serie de movimientos en caso de que no quisiese dar el vuelto: tomaría esa cajita en la que tienen los boletos y se arrebataría, como para tener algo para canjear, o sino, le sacaría la campera, tambien para cambiarla por mis veinte pesos. El viaje seguía y extrañamente , todos los pasajeros descendían por la puerta de adelante, y antes de descender solicitaban al conductor que les diesen el vuelto que le debían, es decir, que el maestro le debía plata a varios de los ocasionales usuarios del servicio nocturno del transporte público, que viajaban en la unidad 38 de la linea 143. Comenzaba a preocuparme...era posible que si estregaba todo su cambio en vueltos no tuviera llegado el momento para darme a mi los dieciocho con cuarenta que me debía, o al menos dieciocho, pensaba, qué me importaban los cuarenta centavos. Cada vez hay menos pasajeros.De pronto recordé lo que me habías dicho al besarte al salir de tu casa: estuve pensando qué haria yo si vos te moris. Y que harias? Me destruiria.
Un escalofríos me recorrió la espalda y te imaginé destruida, desmembrada, desintegrada, inexistente, y no me gustó la idea. Te prefiero construida, por favor no te hagas daño, y menos por mi, te respondí. No podía quedarme un segundo más, tenía miedo de...que me quiebres con tus palabras como dagas o como martillazos de obrero municipal.
Donde yo vivo es cerca del final del recorrido, por lo que siempre soy de los últimos, sino el último en descender. El conductor enciende un cigarrillo y el humo empieza a circular por entre los asientos. A pesar del frío abro la ventanilla. Y qué harías vos si yo me muero? quedé inmóvil por un momento. Nunca había pensado en la posibilidad de tu muerte, en no tenerte o no conocerte, en tu no existencia. Estaba en un brete, no podía no responder tamaña pregunta. Múltiples respuestas que se anulaban unas a otras hac´pian cortocircuito en mi mente.
ey! pibe.El chofer me estaba dando mi vuelto. Nueve billetes de dos pesos, una moneda de veinticinco centacos y otra de diez centavos. Perfecto, jamás creí que por voluntad propia iba a darme lo que me correspondía.
Parada.
Bajo del coche treinta y ocho y comienzo a recorrer las tres cuadras que restaban para llegar a casa.
Me destruiría, repitieron mis labios.
y me sentí muy bien
Ya había desarrollado en mi pensamiento una serie de movimientos en caso de que no quisiese dar el vuelto: tomaría esa cajita en la que tienen los boletos y se arrebataría, como para tener algo para canjear, o sino, le sacaría la campera, tambien para cambiarla por mis veinte pesos. El viaje seguía y extrañamente , todos los pasajeros descendían por la puerta de adelante, y antes de descender solicitaban al conductor que les diesen el vuelto que le debían, es decir, que el maestro le debía plata a varios de los ocasionales usuarios del servicio nocturno del transporte público, que viajaban en la unidad 38 de la linea 143. Comenzaba a preocuparme...era posible que si estregaba todo su cambio en vueltos no tuviera llegado el momento para darme a mi los dieciocho con cuarenta que me debía, o al menos dieciocho, pensaba, qué me importaban los cuarenta centavos. Cada vez hay menos pasajeros.De pronto recordé lo que me habías dicho al besarte al salir de tu casa: estuve pensando qué haria yo si vos te moris. Y que harias? Me destruiria.
Un escalofríos me recorrió la espalda y te imaginé destruida, desmembrada, desintegrada, inexistente, y no me gustó la idea. Te prefiero construida, por favor no te hagas daño, y menos por mi, te respondí. No podía quedarme un segundo más, tenía miedo de...que me quiebres con tus palabras como dagas o como martillazos de obrero municipal.
Donde yo vivo es cerca del final del recorrido, por lo que siempre soy de los últimos, sino el último en descender. El conductor enciende un cigarrillo y el humo empieza a circular por entre los asientos. A pesar del frío abro la ventanilla. Y qué harías vos si yo me muero? quedé inmóvil por un momento. Nunca había pensado en la posibilidad de tu muerte, en no tenerte o no conocerte, en tu no existencia. Estaba en un brete, no podía no responder tamaña pregunta. Múltiples respuestas que se anulaban unas a otras hac´pian cortocircuito en mi mente.
ey! pibe.El chofer me estaba dando mi vuelto. Nueve billetes de dos pesos, una moneda de veinticinco centacos y otra de diez centavos. Perfecto, jamás creí que por voluntad propia iba a darme lo que me correspondía.
Parada.
Bajo del coche treinta y ocho y comienzo a recorrer las tres cuadras que restaban para llegar a casa.
Me destruiría, repitieron mis labios.
y me sentí muy bien
21 de septiembre de 2007
11 de septiembre de 2007
te amo querida
querida dana:
si no estoy contigo no es porque no quiera, sino porque no puedo.
no puedo más ver tu cara en el espejo detrás de mi espalda cada vez que me afeito.
no puedo más resistir el centellante deseo de que te aplaste un piano cayendo como charly del séptimo piso.
no quiero más que me fulmines con tus encantadores encantos que no me dejan dormir en toda la noche
me succionas, me atrapas, me perviertes y me devoras
para finalmente quedarnos dormidos pegados el uno al otro aunque el calor nos derrita y se nos llene de transpiración entre los cuerpos.
querida te quiero
en serio.
te quiero querida.
quisiera decirte te amo, pero te digo que te quiero.
en serio, querida.
no se cuanto tiempo aguante lejos tan lejos de ti.
si no estoy contigo no es porque no quiera, sino porque no puedo.
no puedo más ver tu cara en el espejo detrás de mi espalda cada vez que me afeito.
no puedo más resistir el centellante deseo de que te aplaste un piano cayendo como charly del séptimo piso.
no quiero más que me fulmines con tus encantadores encantos que no me dejan dormir en toda la noche
me succionas, me atrapas, me perviertes y me devoras
para finalmente quedarnos dormidos pegados el uno al otro aunque el calor nos derrita y se nos llene de transpiración entre los cuerpos.
querida te quiero
en serio.
te quiero querida.
quisiera decirte te amo, pero te digo que te quiero.
en serio, querida.
no se cuanto tiempo aguante lejos tan lejos de ti.
10 de septiembre de 2007
A Lowrey, mi extraviado
Entro a la cocina y recuerdo a Carver. La heladera sobre un charco de agua. No vas a escribir un cuento sobre el descongelamiento de la heladera, Dana, no más relatos sobre pisos mojados por heladeras. Me paro en el trapo de piso y comienzo a secar. Si yo no quería...(sonaba una canción) no quería ni siquiera llevar éstas zapatillas. No quería conocerte...sabía que me enamoraría...
Los restos del tallo de la acelga me recuerdan a la cebolla, me producen arcadas, los tiro sobre una bolsa mojada. Quizás mamá los use para la comida del perro, ¡Qué calamidad! Pobrecillo. Me toca lavar la plancha, claro, nunca voy a zafar de la vajilla. ¡Cómo puedo usar tanto aceite! Se acumula en las arterias, las obstruye y desemboca en un paro cardiorrespiratorio. Rocío con un desengrasante ultrapotente y le echo agua hervida. Anoche comí huevo frito con arroz. ¿Te acordás Lowrey? Te conocí un día lluvioso luego de un huevo frito. Había partido la cáscara de modo incorrecto y me enchastré los dedos con la clara. Te lo conté en mi primer comentario a tu blog. Creo que el peor de los finales es la indiferencia. De repente nunca más nos contestamos nada, cada uno en paralelo: mismo lugar, misma hora. El peor de los finales es aquello que persiste sobre un asunto pendiente y, que sin embargo, no somos capaces de clausurar.
Hoy te homenajeo, febril y desconcertada, sobre la capa de aceite en el teflón. Aspiraré el aroma del huevo en mis dedos y pensaré: ¿dónde estás querido?. Por qué de ésta forma, habiendo tantas otras mucho mas efectivas de no estar.
Si yo no quería...no quería ni siquiera llevar éstas zapatillas. No quería conocerte...sabía que, tarde o temprano, me enamoraría.
Los restos del tallo de la acelga me recuerdan a la cebolla, me producen arcadas, los tiro sobre una bolsa mojada. Quizás mamá los use para la comida del perro, ¡Qué calamidad! Pobrecillo. Me toca lavar la plancha, claro, nunca voy a zafar de la vajilla. ¡Cómo puedo usar tanto aceite! Se acumula en las arterias, las obstruye y desemboca en un paro cardiorrespiratorio. Rocío con un desengrasante ultrapotente y le echo agua hervida. Anoche comí huevo frito con arroz. ¿Te acordás Lowrey? Te conocí un día lluvioso luego de un huevo frito. Había partido la cáscara de modo incorrecto y me enchastré los dedos con la clara. Te lo conté en mi primer comentario a tu blog. Creo que el peor de los finales es la indiferencia. De repente nunca más nos contestamos nada, cada uno en paralelo: mismo lugar, misma hora. El peor de los finales es aquello que persiste sobre un asunto pendiente y, que sin embargo, no somos capaces de clausurar.
Hoy te homenajeo, febril y desconcertada, sobre la capa de aceite en el teflón. Aspiraré el aroma del huevo en mis dedos y pensaré: ¿dónde estás querido?. Por qué de ésta forma, habiendo tantas otras mucho mas efectivas de no estar.
Si yo no quería...no quería ni siquiera llevar éstas zapatillas. No quería conocerte...sabía que, tarde o temprano, me enamoraría.
9 de septiembre de 2007
Platos
- Me toca a mí lavar los platos, no?. Es raro, siempre me toca. Ansío el día en que me digas “Hoy no te toca”. Debe ser una sensación extraña eso de que “no me toque”. Encima hace un calor de la puta madre, el agua fría sale caliente y el agua caliente hierve. Qué detergente horrible compraste, no desengrasa la vajilla -
- Justo cuando estaba eligiendo el desengrasante, lo vi cruzar de góndola en góndola con la nueva novia. De la mano -
Entiendo cómo sigue. Punción sobre el lado izquierdo del pecho. No estás segura si son gases o es adrenalina. Después, temblor y palpitaciones con la mano adherida al detergente como si la corriente eléctrica te chupara. La sangre se baja toda a los pies y te los hincha, los aploma al pasillo del súper. El pecho te arde. Recordás que el doctor zinc dice que cuando se manifiesta el ardor, hay que llamar inmediatamente a una ambulancia. Te ves horrible, pálida y poca cosa. No podés razonar tus movimientos, y de los nervios, te guardás una virulana en la cartera pensando que la estabas colocando en el carro. Él ya te vió; la novia no sabe quién carajo sos, por qué su novio te mira consternado. Oís una interferencia de walkie talkie : femenina, pollera rosa, saco blanco, cuarenta años. Hurto.
El policía está detrás tuyo; tomándote del brazo, pidiéndote de buenas maneras, que lo acompañes a la administración ( quiere decirte que estás demorada, pero en otras palabras).
Él quiere acercarse para colaborar de testigo a tu favor. Vos cerrás fuerte los ojos y sabés que aunque intentes explicarlo, no tiene sentido.
Las evidencias demuestran todo lo contrario.
- Justo cuando estaba eligiendo el desengrasante, lo vi cruzar de góndola en góndola con la nueva novia. De la mano -
Entiendo cómo sigue. Punción sobre el lado izquierdo del pecho. No estás segura si son gases o es adrenalina. Después, temblor y palpitaciones con la mano adherida al detergente como si la corriente eléctrica te chupara. La sangre se baja toda a los pies y te los hincha, los aploma al pasillo del súper. El pecho te arde. Recordás que el doctor zinc dice que cuando se manifiesta el ardor, hay que llamar inmediatamente a una ambulancia. Te ves horrible, pálida y poca cosa. No podés razonar tus movimientos, y de los nervios, te guardás una virulana en la cartera pensando que la estabas colocando en el carro. Él ya te vió; la novia no sabe quién carajo sos, por qué su novio te mira consternado. Oís una interferencia de walkie talkie : femenina, pollera rosa, saco blanco, cuarenta años. Hurto.
El policía está detrás tuyo; tomándote del brazo, pidiéndote de buenas maneras, que lo acompañes a la administración ( quiere decirte que estás demorada, pero en otras palabras).
Él quiere acercarse para colaborar de testigo a tu favor. Vos cerrás fuerte los ojos y sabés que aunque intentes explicarlo, no tiene sentido.
Las evidencias demuestran todo lo contrario.
7 de septiembre de 2007
A 3 Rounds
Prender la luz del celular para ver la hora. Una hora y otra hora y la siguiente. Volver al cuarto a buscar el teléfono sobre la mesa de luz. Chequear la hora y...nada sobre la pantalla, excepto la campana de la alarma que me olvidé de cancelar. El pelo me molesta, está mal atado, siento cómo se deshace el rodete de la noche anterior. Me miro en el espejo del hall y me acuerdo que tengo que buscar el celular. Regreso a la mesa de luz pero tengo miedo de prenderlo.
Mi amiga Dolores me solicita via "mail": "Si vas bien con el trabajo y vas bien con el amor, tenés casi el 60 % de tu vida en buen estado . Claro... yo soy una persona de bien...como dicen en pasión de gavilanes...él me dijo que hace mil años se peleó de la novia pero que no me quería decir porque él siente que yo necesito una excusa para verlo... y yo le aclaré que me da igual que esté o no de novio...que si un chico me gusta, esté o no de novio, me va a gustar igual (jaaaa que puta de mierda)...la cuestión es que me sigue jodiendo pa que nos veamos y ahí ya me puse seria y le dije que yo tenía mucho pa perder si lo veía, y que no estaba encondiciones de perder cosas...así que me entendió y se tranquilizó...
Pero es más fuerte que yo... no puedo dejar de presumirle a ese chico
Mi amiga Dolores me solicita via "mail": "Si vas bien con el trabajo y vas bien con el amor, tenés casi el 60 % de tu vida en buen estado . Claro... yo soy una persona de bien...como dicen en pasión de gavilanes...él me dijo que hace mil años se peleó de la novia pero que no me quería decir porque él siente que yo necesito una excusa para verlo... y yo le aclaré que me da igual que esté o no de novio...que si un chico me gusta, esté o no de novio, me va a gustar igual (jaaaa que puta de mierda)...la cuestión es que me sigue jodiendo pa que nos veamos y ahí ya me puse seria y le dije que yo tenía mucho pa perder si lo veía, y que no estaba encondiciones de perder cosas...así que me entendió y se tranquilizó...
Pero es más fuerte que yo... no puedo dejar de presumirle a ese chico
4 de septiembre de 2007
Especial de jueves
Especial de jueves ( el viernes 7 NO HAY karaoke)
para los que gustan de comenzar el fin de semana desde la primera hora
○■○■○■○■○■○■○■○■○■○■
KARAOKE DEL AMOR
+
MAX Y LOWREY
○■○■○■○■○■○■○■○■○■○■
JUEVES 6 SEP/ medianoche
Bar del Circulo.Mendoza 240
Show + karaoke: $3. Karaoke:$2 . Capacidad limitada
para los que gustan de comenzar el fin de semana desde la primera hora
○■○■○■○■○■○■○■○■○■○■
KARAOKE DEL AMOR
+
MAX Y LOWREY
○■○■○■○■○■○■○■○■○■○■
JUEVES 6 SEP/ medianoche
Bar del Circulo.Mendoza 240
Show + karaoke: $3. Karaoke:$2 . Capacidad limitada
1 de septiembre de 2007
Motor Fundido
IX
-¿Querés llamarme?/Preferiría hablar por tel
-Sí, te llamo.
-Si querés...
-Sí, quiero. ¿Vos querés?
Cuán feo suena decirte
recordame tu número
- 42959245/ yo tampoco recuerdo el tuyo
- 49880496/ ¿atendés vos?
- Estoy solo
German Weissi
De la plaqueta: Con Hernán, editada por Ediciones Proveedora De Droga.
www.colorpastel.blogspot.com
-¿Querés llamarme?/Preferiría hablar por tel
-Sí, te llamo.
-Si querés...
-Sí, quiero. ¿Vos querés?
Cuán feo suena decirte
recordame tu número
- 42959245/ yo tampoco recuerdo el tuyo
- 49880496/ ¿atendés vos?
- Estoy solo
German Weissi
De la plaqueta: Con Hernán, editada por Ediciones Proveedora De Droga.
www.colorpastel.blogspot.com
Suscribirse a:
Entradas (Atom)