2 de septiembre de 2008

La ruta de la ballena



Nado porque los demás me lo permiten, duermo porque a los demás se les da la gana, me levanto, desayuno, me comunico con los otros sólo porque a los otros se les antoja, no me muero porque tengo suerte y el día que me muera no va a ser de mi incumbencia, voy a morir cuando tengan ganas de matarme, si me salvo es porque han querido salvarme, si pendo del abismo hamacado por un viento endemoniado y aún así tengo el tremendo privilegio de no caer, no es por mi suerte ni por mi calidad para deslizarme, ni por mi estilo para flotar, ni por las peripecias al zambullirme. El agua me hace creer que la traslación se genera por mi mérito, que cuando llego a las orillas para el parto es solamente gracias al automóvil que tengo de corazón. La monstruosidad en mi cabeza se arrastra inevitable como las corrientes. Puedo reposar, expulsar mi aliento, ponerme en guardia, deslizarme. Los vientos me llevan para adentro sin esfuerzo.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

ah tu fotolog es el de las muñecas, esta bueno

Berenizz dijo...

que foto tan terrible
todo lo contrario al post